
Tu quoque Brute?[1]
Desde hace años dice el pueblo que las mujeres andan
revueltas. Y como en estos lares presumimos de vivir en una democracia, parece
que al pueblo nadie puede llevarle la contraria sin arriesgarse a recibir una
justa coñeja. En todo lo que el pueblo dice siempre lleva la razón de su lado. Y
esa compañía resulta demoledora. Aunque sean, sobre todo, los hombres quienes
repitan la frase...